Salamanca es una de las ciudades más encantadoras de nuestro país y de eso no cabe ninguna duda.
Pero no sólo la capital goza de encanto, además en toda la pronvincia se pueden visitar pueblos súper bonitos llenos de tradición, arquitectura y gastronomía que los convierten en un atractivo más a descubrir.
Como es probable que en tu escapada a Salamanca no te dé tiempo a verlos todos, te dejamos una lista de los que no te puedes perder en tu próxima visita.
Ciudad Rodrigo
Es una de las localidades con más carga histórica, algo que se puede comprobar sólo con contemplar su arquitectura.
Está situada a los pies de la Sierra de Gata y en 1944 fue declarado Conjunto Histórico Artístico.
La ciudad es una auténtica plaza fortificada llena de edificios tanto de carácter civil como religioso entre los que destacan el Castillo de Enrique II de Trastámara, la Catedral de Santa María, la Capilla de Cerralbo, la Casa de la Cadena y por supuesto sus murallas.
Cantalapiedra
Con alrededor de 1.000 habitantes, Cantalapiedra está situado justo en la frontera con Valladolid, más concretamente en la comarca de Tierra de Peñaranda.
Este pequeño pueblo es el inicio de una de las rutas más interesantes del románico mudéjar.
En él se pueden admirar obras como el Monasterio del Sagrado Corazón, el Torreón del Deán, la Plaza Mayor con su iglesia de Santa María del Castillo o la casa de los Onís entre otros.
Ledesma
A sólo 35kms de Salamanca se encuentra este pueblo de origen prehistórico que cuenta con un conjunto histórico artístico bastante y etnográfico.
Paseando por sus calles se pueden descubrir monumentos de esa época como El Verraco o el Menhir del Mirador además de restos posteriores de su muralla romana.
Entre sus muchísimos monumentos destacan el Palacio de Beltrán de la Cueva, el Puente Viejo, el Monasterio de San Salvador o la Casa de las Almenas.
Si te gusta la naturaleza, hacer la ruta del Puente Mocho no te defraudará. Este puente se cree que data de la época romana porque en sus extremos se han encontrado restos de una calzada romana. Su entorno natural está formado por un bosque de encinas centenarias donde es posible contemplar el buitre leonado o el milano negro.
San Martín del Castañar
Este pueblo destaca por sus tradicionales casas con fachadas hechas a base de entramados de madera y piedra con típicas balconadas.
Desde su Castillo hay unas bonitas vistas destacando entre todos los tejados el campanario de la iglesia de San Martín.
Saliendo del pueblo hay una ruta, de 9 kilómetros bastante curiosa, Asentadero – Bosque de los Espejos. Este camino circular discurre entre los municipios de San Martín, las Casas del Conde y Sequeros cuenta con obras de arte expuestas en plena naturaleza.
La Alberca
Este precioso pueblo de apenas 1.000 habitantes ha sabido conservar perfectamente su esencia y arquitectura popular.
Sus calles empedradas y sus casas con entramado de madera hacen al turista viajar a tiempos pasados.
Fue declarado en 1940 Conjunto Histórico – Artístico y su arquitectura muestra grandes influencias de la cultura cristina, islámica y judaica.
Muy próximo a La Alberca se encuentra el Parque Natural de las Batuecas. Más de 30.000 hectáreas con una gran biodiversidad que le otorgó la categoría de reserva de la biosfera por parte de la UNESCO.