Si el año pasado ya le echaste un ojo a la guía básica de todo lo que no te podías perder si era la primera vez que ibas a las Fiestas Del Pilar, este año le damos un repaso a todos los platos típicos que tendrás que probar si has decidido repetir experiencia.

Marcada por su ubicación en el interior, la gastronomía de Zaragoza se basa principalmente en los productos de la huerta y la caza. Una cocina sencilla y sin pretensiones con algunas influencias de las cercanas Navarra y La Rioja.

Ternasco asado

Sin lugar a dudas su plato estrella. Se trata de una de las mejores carnes de cordero que existen.

Lo especial del ternasco reside en su tierna carne al tratarse de animales jóvenes que no pesan más de 12 kilos y que se ha alimentado exclusivamente de leche materna y cereales naturales.

Su preparación habitual es asado al horno y acompañado de una guarnición de patatas, cebolla y tomates pero también se puede comer a la brasa, caldero y hasta en bocadillo.

Una de las mejores opciones para reponer fuerzas durante las fiestas.

Pollo al chilindrón

Otro de los platos que no puede faltar y que lleva preparándose durante décadas es el popular pollo al chilindrón.

Su salsa cuyos ingredientes principales son el tomate, la cebolla, el pimiento rojo y el pimiento verde es la que le aporta el toque sabroso al guiso.

Migas aragonesas

Aunque se cocina en muchas provincias, podemos considerar la zona de Aragón como la creadora de este plato tan humilde que antiguamente servía de alimento de pastores y que estaba compuesto de pan y tocino.

En la versión actual se le añaden uvas, longaniza, etc. Se presentan y se comen en cazuelita de barro y con cuchara de madera.

Borraja con patatas

Si no conoces a gente de Zaragoza seguramente nunca hayas oído hablar de la borraja ya que es una verdura que sólo se cultiva en esta provincia.

Aunque su aspecto no resulte demasiado apetecible es un alimento súper nutritivo, rico en vitamina A y C. Es típico comerla cocida con patatas o con almejas.

Bacalao al ajoarriero

Esta receta tan representativa de la zona aragonesa antiguamente se consideraba un plato festivo propio de la Nochebuena porque era costumbre tomarlo al volver de la Misa del Gallo. Se servía acompañado de vino donde se dejaban macerar higos secos, manzanas, membrillo, nuez moscada, azúcar y canela.

Frutas de Aragón

Después de tanto plato salado por fin le llega el turno a lo dulce.

Aunque por fuera pueden parecer un bombón, las Frutas de Aragón se tratan de trozos de frutas confitados recubiertos por una fina cobertura de chocolate. Se usan están la pera, la manzana, los higos, las cerezas, las ciruelas o las naranjas.

¿Ya estás list@ para comerte este año las Fiestas del Pilar?