Extremadura, aunque gran desconocida para muchos, es un una tierra llena de rincones maravillosos con un gran patrimonio monumental.

Si no has tenido la oportunidad de conocerla todavía, te vamos a contar algunos de sus secretos mejor guardados que despertarán tus ganas de viajar a Extremadura.

Un viaje perfecto para hacer con toda la tranquilidad y calma del mundo.

 

Ciudad Romana de Regina

A las afueras del municipio pacense de Casas de Reina se encuentran en perfecto estado de conservación los restos de la ciudad romana de Regina Turdulorum.

Destaca por un lado el teatro, que fue construido en el año 1 d.C con una capacidad para aunas mil personas y que estuvo en funcionamiento hasta el siglo IV d.C; y por otro lado el foro de Regina, donde se ver los cimientos de algunas casas, edificios civiles y vías dejando al descubierto su perfecto sistema de alcantarillado.

 

Barrio Judío de Hervás

A las orilla del río Ambroz, en la localidad cacereña de Hervás, se encuentra este barrio judío declarado Conjunto Histórico- Artístico en 1969.

Deambular por sus callejuelas estrechas con casas típicas de grandes voladizos hechas de materiales autóctonos te trasportarán a otra época.

Encontrarás pequeños talleres de artesanía que siguen trabajando la madera, el vidrio o el cuero y te podrás sentar a degustar su famoso vino de pitarra. Ese es parte del encanto de la Judería de Hervás.

 

La ciudad de las cinco torres

Conocida como la ciudad de las cinco torres la ubicación y la orografía del terreno ha convertido a la pintoresca ciudad de Jerez de los Caballeros en un laberinto de calles salpicado de pequeñas plazas, palacetes e iglesias con altos campanarios barrocos que sobresalían por encima del resto de edificios como si de mismísimos rascacielos se tratasen.

Las más importantes son las de San Miguel, Santa Catalina, Santa María de la Encarnación y sobre todo la de San Bartolomé, mucho más llamativa y graciosa que el resto.

 

Zafra

Conocida por algunos como Sevilla la Chica, este municipio de la provincia de Badajoz goza de una vida social muy animada que gira entorno a dos plazas, la Grande y la Chica.

Ambas rodeadas por casas enjalbegadas, palacetes, balcones y terrazas al aire libre es el lugar idóneo para hacer un alto en el camino, tomar el aperitivo y disfrutar de una buena tertulia.

 

Los Barruecos

En Malpartida de Cáceres se ubica este espacio natural sin apenas elevaciones que se caracteriza por la proliferación de inmensos bolos graníticos o berruecos.

En 1996 fue declarado Monumento Natural con el objetivo de proteger su flora, su fauna y sobre todo los restos arqueológicos que en él se encontraron.

Además de las grandes rocas, otro elemento característico de este paisaje son las charcas creadas de forma natural a partir de las lluvias y que forman un hábitat ideal para algunas aves y mamíferos.

 

Murallas de Galisteo

La muralla más sorprendente de toda la Vía de la Plata son las que rodean a este pequeño pueblo de la provincia de Cáceres a orillas del río Jerte.

Con once metros de altura y tres de espesor, esta muralla de origen islámico hecha con canto rodado es el gran atractivo de Galisteo.

En su interior se puede visitar un casco urbano que guarda algún que otro tesoro de la arquitectura mudéjar extremeña, como es el caso de La Torre de la Picota, desde dónde se pueden contemplar las mejores vistas de la vega y el puente medieval sobre el río Jerte.

 

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