Cuenca, es una provincia que ofrece unos paisajes lleno de contrastes.

Estampas de pueblos que van desde la característica llanura manchega hasta la serranía haciendo de la provincia castellano manchega un destino con mucho encanto.

Priego:

Es uno de los municipios más bonitos y con más abolengo de Cuenca. Se fundó en la Edad Media y cuenta con un rico patrimonio monumental.

Además de destacar el palacio renacentista del XVI que alberga el Ayuntamiento, son de gran interés cultural el castillo, la fuente, el puente romano y el Torreón del Despeñaperros, única fortaleza árabe que queda.

Priego muestra la frontera natural entre las altiplanicies de la Alcarria y la Serranía de Cuenca. Es un buen lugar para hacer turismo activo.

Belmonte:

Conocido por ser la cuna del poeta Fray Luis de León es uno de los pueblos que forman la Ruta del Quijote.

Su casco antiguo lleno de edificios señoriales está declarado Bien de Interés Cultural.

Cuenta también con uno de los castillos más bellos de toda España que ha sido escenario de varias películas.

Otro de los monumentos más importantes que visitar en Belmonte es la Colegiata de San Bartolomé de estilo gótico y en cuya construcción participaron algunos de los mejores artesanos de la época.

Huete:

Considerado el más antigua de la provincia, sus orígenes se remontan a la época romana.

Gran número de casas palacio y casonas señoriales forman parte de su patrimonio. Uno de sus edificios más emblemáticos es el Monasterio de Santa Mª de la Merced donde se encuentra el Museo de Arte Contemporáneo de Florencio de la Fuente.

En lo más alto de la ciudad se encuentra el Castillo de la Luna, una alcazaba árabe desde cuyas ruinas se divisa unas vistas espectaculares de la zona.

Monumentos civiles como el Pósito, la Torre del Reloj o el acueducto de Valdilongo completan junto con los numerosos templos el conjunto artístico de Huete.

Mota del Cuervo:

Justo en el corazón de La Mancha, encontramos este pueblo que conserva un interesante núcleo de casas señoriales.

Esta localidad es la muestra más pura de los pueblos manchegos. Visitarla es como hacer un viaje por los escenarios de El Quijote.

Mota del Cuervo es conocida como el Balcón de La Mancha por la maravillosa estampa de esas tierras que muestra a todos sus visitantes.

Lo que más llama la atención de su entorno es el grupo de molinos de viento situado sobre la cumbre del cerro.

El barrio de las cantarerías refleja la actividad y la tradición alfarera de la zona, que es también uno de sus mayores atractivos.

Enguídanos:

A orillas del río Cabriel está este municipio de la Serranía de Cuenca que es sin duda uno de los más hermosos y visitados por tener un paraje natural perfecto para hacer rafting, senderismo, barranquismo, etc.

Los embalses y pantanos que lo rodean, en verano, se convierten en unas estupendas piscinas naturales donde se bañan los habitantes de Enguídanos y alrededores.

Paseando por sus calles de pueden ver detalles de las fachadas de casas solariegas o palaciegas con escudos, rejas o decoraciones que llaman la atención.

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