Sabemos que lo responsable estos días en quedarnos en casa y evitar salir a la calle salvo por motivos excepcionales como ir a la farmacia, la tienda de alimentación más cercana o el supermercado, un máximo de 1 o 2 veces en semana.

Si quieres que esta tarea no te suponga ningún estrés y hacerlo con la mayor tranquilidad posible, te contamos como conseguirlo y las precauciones que debes tomar.

consejos para hacer la compra en el supermercado

 

🔷 Ir de uno en uno: Aunque viváis varias personas juntas, no debéis ir más de uno. Una buena solución es establecer turnos y que cada vez vaya uno. ¡Recuerda! si presentas algún síntoma no salir bajo ningún concepto.

 

🔷 Con lista de la compra siempre: planifica lo que vas a comer a una semana vista y haz una lista detallada de todos los alimentos que necesitas. Esto además nos ayudará a pasar menos tiempo en el supermercado y agilizar las colas de espera fuera del establecimiento.

 

🔷 Distancia de seguridad: Una vez dentro de la tienda, mantener una distancia de seguridad de un metro y medio como mínimo con el resto de clientes.

Es muy importante en este punto evitar hacer la compra en horas punta (primeras horas y mediodía). Entérate de los horarios de los supermercados de tu barrio y adáptate a ellos.

 

🔷 Usa guantes: es obligatorio usar guantes de plástico desechables para tocar cualquier producto, sobre todo los alimentos frescos. Mientras los lleves puestos, evita tocarte la cara y tíralos nada más salir del establecimiento.

 

🔷 Paga con tarjeta o móvil: cuanto menos dinero en metálico manipulemos mejor. Paga siempre con tarjeta sobre todo si tiene sistema contactless o con el móvil y no toques billetes ni monedas.

Las personas que trabajan en las cajas te lo agradecerán.

 

🔷 Lleva tus propias bolsas o carrito: Evita tocar las cestas y carritos del propio supermercado porque contienen muchas bacterias. Coge bolsas de tela o plástico que tengas en casa y cuando vacíes la compra límpialas o lávalas con agua caliente.

 

🔷 Desinfecta la zona de contacto: Una vez en casa, intenta no colocar la compra en la encimera de la cocina, mejor en el suelo. Cuando hayas acabado de colocar todo, limpia las superficies que hayan estado en contacto con lejía diluida en agua o alcohol de 70º en su defecto.