La Costa de la Luz y la Costa del Sol son dos de los destinos de vacaciones más solicitados en verano. El buen tiempo, la amabilidad de su gente, las playas, etc.
Con Avanza recorrerás toda la Costa del Sol, pero esta vez nos vamos a Cádiz con toda la familia.
Si te decides por alguna de las playas de la Costa de la Luz, no dudes en reservar una mañana para recorrer las calles de esta bonita ciudad.
Un poquito de historia
Fundada por los fenicios, a lo largo de la historia los romanos, los árabes y los cristianos han ido dejando su impronta en la ciudad. Ha habido dos momentos en los que Cádiz tuvo de manera indiscutible un papel protagonista en la historia de España.
rimero, con el descubrimiento de América, Cádiz, junto con Sevilla, se convirtió en puerto de atraque de los navíos que venían del Nuevo Mundo. Después, con la promulgación de la primera Constitución española, el 19 de marzo de 1812, en plena guerra entre España y Francia. Cádiz se ganó así un hueco en la historia de España por derecho propio.
Como ves, son muchas las razones para visitar la ciudad de Cádiz. Así que en este artículo te proponemos una ruta muy sencilla para que puedas darte un paseo durante una mañana, aprovechando que aún no apriete mucho el Sol.
La ruta
- Plaza de San Juan de Dios
El recorrido a pie por la ciudad comienza en la Plaza de San Juan de Dios. También conocida como la Plaza Mayor o la Plaza de la Corredera, constituye el centro del casco urbano de Cádiz.
Conforme vas avanzando, te acercas a dos de los principales edificios que dan a la plaza: el Ayuntamiento y la Iglesia de San Juan de Dios.
- El Ayuntamiento
Un pórtico con arcos de medio punto sustenta la columnata de estilo jónico que, a su vez, soporta el frontón que preside el conjunto, coronado por la torre del reloj de estilo manierista. El ayuntamiento de Cádiz se ha ubicado aquí desde el siglo XVI, pero el edificio que ves data del siglo XVIII.
- La Iglesia de San Juan de Dios
Justo al lado se encuentra una de las iglesias más bonitas de la ciudad: la Iglesia de San Juan de Dios. Se trata de una de las iglesias más antiguas de Cádiz y en tiempos cumplió incluso funciones catedralicias junto con la Iglesia de la Santa Cruz.
El hecho de tener planta de cruz griega ya supone una característica no muy común en las iglesias españolas. Un retablo de estilo barroco, con elementos neoclásicos y tallas espectaculares en un espacio muy recogido, que invita al sosiego en pleno centro de la ciudad.
- La Casa de los Pazos Miranda
Desde aquí nos dirigiremos a la Catedral a través de la calle Pelota, dejando a nuestra derecha la Casa de los Pazos Miranda, de color rosa y beige, construida a finales del siglo XVIII. Fue obra de Miguel Olivares, arquitecto al que se atribuyen edificios como la ermita de San Pedro en Ubrique o algunos elementos de la Colegiata de Jerez.
Un poco más adelante te encontrarás, también a tu derecha una de las tiendas más curiosas de la ciudad. Se llama Herakles y se dedica a la comercialización de reproducciones arqueológicas a escala. Anillos, colgantes, monedas que cumplían funciones de lo más extrañas. Si vas con los más pequeños puedes preguntar por el anillo de Silvano, que inspiró la saga del Señor de los Anillos.
La Catedral Desde la calle Pelota llegamos a la catedral. Construida entre los años 1722 y 1838 lo primero que te llama la atención es su fachada a base de formas curvas, cóncavas y convexas. Se puede acceder a la catedral desde la torre de la izquierda.
La entrada, con la audioguía incluida, cuesta 6 euros para los adultos y 4 euros para los estudiantes hasta los 24 años. La visita incluye la propia catedral, la cripta, el coro, la sacristía, la Casa de Contaduría y la Torre del Reloj.
En la Casa de Contaduría se encuentran los tesoros de la catedral. Desde la Torre del Reloj no sólo se tiene una de las mejores panorámicas de Cádiz, sino que también podrás observar el elemento más característico de esta catedral.
Estamos hablando de la cúpula recubierta con azulejos de cerámica amarillos. Es la única catedral del mundo con una cúpula así. Por esa razón, la cúpula se ha convertido en una de las señas de identidad de la ciudad.
Callejeando por Cádiz
Una de las actividades más recomendables para hacer en la ciudad es pasear por el entramado de calles peatonales y callejones que se despliega por el centro histórico. Puedes dirigirte por la calle Compañía a la Plaza de las Flores, repleta de puestos florales.
Y desde la plaza, a través de la calle Libertad, puedes tomar la calle Sacramento hasta llegar a la Torre de Tavira. Comprobarás que se trata de una zona muy comercial, en la que tiendas, bares y restaurantes se van intercalando.
- La Torre de Tavira
Otra de las señas de identidad de la ciudad son las llamadas torres miradores. Construidas en su mayoría entre los siglos XVII y XVIII, cumplían dos funciones. Por un lado, eran un espacio de reunión y por otro lado servían como observatorio para informar del trafico marítimo a los navíos que recalaban en la ciudad.
En la actualidad, se calcula que pueden existir en pie unas 125 torres miradores. La Torre de Tavira es una de esas torres miradores. Puedes subir a la torre y tener, de nuevo, una maravillosa panorámica de la ciudad.
Pero si la torre va a tener interés para los más pequeños no va a ser (sólo) por las vistas. Y es que en la torre se ha construido una cámara oscura. Se trata de un artefacto que permite proyectar, en una sala totalmente a oscuras y sobre una pantalla blanca, horizontal y redonda, una imagen de lo que está sucediendo en el exterior de la torre. La tarifa es de 7 euros, si bien tienen una tarifa reducida de 5,50 euros para determinados colectivos.
Si te gusta este tipo de artilugios, puedes aprovechar para ver otros cuando visites el Castillo de San Jorge de Lisboa o la ciudad antigua de Edimburgo. En España no hemos visto ninguno igual.
Hora de tomar un aperitivo
Puede que sea el momento de retroceder sobre tus pasos por la calle Sacramento hasta la calle Columela y probar alguna de las tapas que ofrece la Tapería de Columela en la Calle Columela, 4. Tiene incluso un menú de tapas para niños.
Desde allí, a través de la Plaza del Palillero y la calle Ancha puedes llegar a otra de las plazas más conocidas de Cádiz, la Plaza de San Antonio.
- La Plaza de San Antonio
La Plaza de San Antonio constituye el otro centro neurálgico de la ciudad, junto con la Plaza de San Juan de Dios. Además de albergar la residencia de algunos de los ciudadanos más ilustres de la historia de Cádiz, fue testigo de la promulgación de la Constitución de 1812. Recibe su nombre actual desde que en el siglo XVII se construye la Ermita de San Antonio.
- La Plaza Mina y la Plaza de San Francisco.
Desde la Plaza de San Antonio, te puedes dirigir a la zona que en tiempos fue ocupada por los Franciscanos antes de la desamortización. En la Plaza Mina primero encontrarás lo que en tiempos fue el huerto del convento. Y en la Plaza de San Francisco podrás ver lo que queda del convento y la iglesia. Si tienes tiempo, entra en la iglesia para disfrutar del contraste entre el blanco de las paredes y el dorado del retablo, las balaustradas, el órgano y las pechinas de las cúpulas.
Una parada para comer.
Como ya se te habrá hecho la hora de comer, puedes aprovechas para sentarte un rato a la mesa en el Mesón Cumbres Mayores, en la calle Zorrilla, 4, o en la Taberna del Anteojo, en la calle Zorrilla, 11. Si quieres algo más informal, siempre te puedes tomar algo en la barra del Balandro, en Alameda Apodaca, 22.
- El Monumento a las Cortes
Terminamos nuestra ruta con el Monumento a las Cortes, ubicado en la Plaza de España. Un conjunto de grandes dimensiones construido entre 1911 y 1929. Se trata de una estructura con forma de hemiciclo que rodea una pilastra sobre la que se apoya la constitución de 1812. Un conjunto muy armónico y quizás el más espectacular que se haya hecho para conmemorar uno de los textos fundamentales que han regido la vida de España desde el siglo XIX.
De esta forma, habrás pasado una mañana de lo más agradable en esta fantástica ciudad. Y si te quedan ganas para disfrutar de la tarde, siempre te puedes quedar en alguna de las playas de la ciudad como la playa de la Victoria, la playa de la Cortadura o la playa del Chato. O un poco más lejos, en la ciudad de La Barrosa, probar con tus hijos unas clases de Surf con los chicos de escuela de surf de Esencia.
Artículo de Enrique Sánchez