Salamanca, la eterna universitaria
Por si algún despistado aún no la conoce, hoy te hablamos de Salamanca, la que a día de hoy se considera la ciudad universitaria por excelencia de España.
Ligada a la cultura, la sabiduría, el aprendizaje… para cualquier viajero amante del arte, es una visita obligada. A modo de pequeña ruta hay unos cuantos sitios que merecen un huequito en tu agenda para que los visites.
- En el casco antiguo de la ciudad nos encontramos su Plaza Mayor construida en el siglo XVIII y considerada una de las más bonitas de toda la península. Para quedar con alguien, no hay mejor punto de encuentro que ¡debajo de su reloj!
- Si viajas en pareja, el Huerto de Calixto y Melibea se convertirá en el escenario más romántico. Situado en la antigua muralla al lado del río Tormes podréis pasear por sus jardines y poner un candado con vuestros nombres en su pozo como símbolo de amor.
- En todas las ciudades españolas solemos tener una catedral que visitar, pero en Salamanca a falta de una ¡hay dos! la Vieja, en la que destaca su Torre del Gallo, y la Nueva, dónde tendréis que buscar en su pórtico la figura del astronauta y el dragón comiendo un helado. Desde sus torres podréis contemplar unas vistas espectaculares.
- Frente a La Clerencía se encuentra La Casa de las Conchas, uno de los monumentos más conocidos de Salamanca cuya fachada está adornada con más de 300 conchas de Santiago además de otros motivos decorativos que la hacen única.
- Si por algo es conocida esta ciudad es por tener la Universidad más antigua de España. Si eres estudiante y supersticioso busca en su fachada la Rana y la Calavera, porque según cuenta la leyenda el que no las encuentre… no aprobará el curso.
- Casa Lis, el actual museo de Art Nouveau y Art Decó no te dejará indiferente. Te cautivarán sus magníficas vidrieras.
- Podréis seguir el recorrido dando un agradable paseo por la orilla del río Tormes y cruzar su puente romano.
- Pero en Salamanca no todo es arte. Como buena ciudad universitaria cuenta con cientos de bares que abren desde primeras horas de la mañana en los que podréis desde desayunar a tomar unas tapas para comer o unas copas por la noche. Si os gusta probar productos típicos de los sitios a los que viajáis, apuntad en vuestra lista los embutidos salmantinos, su famoso hornazo, la carne morucha, la chanfaina, el bollo maimón o las perrunillas.
- Ya sabéis que las ciudades de noche tienen un encanto especial, así que no os perdáis la versión nocturna de Salamanca: locales con actuaciones en directo, discotecas donde bailar hasta el amanecer, tunos animando las calles, bares para echar una partida de cartas…
En definitiva una ciudad de los más completa e ideal para hacer una escapadita de vez en cuando.
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